Muchos conocen la historia del científico que vivía sumamente preocupado con los problemas del mundo, decidido a buscarles solución.
En algún momento, su hijito de siete años entra en el laboratorio deseoso de ayudar a su papá. El científico, por lo contrario, nervioso por la interrupción y viendo que era imposible sacarlo, cogió una revista que tenía en su portada un mapa del mundo, se la arrancó, la cortó en varios pedazos con una tijera, y se la dio al niño para que se entretuviera armando el rompecabezas, mientras él continuaba tranquilamente con sus experimentos.
Luego de unas pocas horas, el buen hombre oyó que el niño le decía: “Papá, ya arreglé el mundo.”
El científico, asombrado, levantó la vista del microscopio pensando que lo que vería sería el resultado del torpe trabajo de un niño. Sin embargo, para su gran sorpresa, el mapa estaba completo. Todos los pedazos habían sido colocados perfectamente en sus respectivos lugares. ¿Cómo había sido esto posible? ¿Cómo era que el niño había logrado esto?
La asociación SOS Bullying, creada para combatir el acoso escolar, ha recibido más de 4,200 denuncias durante sus primeros meses de vida. El acoso escolar se da sobre todo en alumnos de Educación Secundaria y de Bachillerato, y se detecta un descenso de la edad de los agresores (algunos hasta de tres años).
¿Cómo evitar convertirse en una víctima del bullying? ¿Qué puede hacer un niño cuando ya es objeto de la crueldad de sus compañeros? La experta, Nora Rodríguez, elabora este decálogo para escolares en apuros (Cfr. La Crónica) que nosotros reproducimos.
1.- Ignorar al bully y sus secuaces. El bully ataca al que responde, no al que lo ignora. Cuando es ignorado se desmorona, de ahí que ante una provocación una respuesta ingeniosa sea ¿Y? es como decir ¿Qué quieres decir con eso? Y nunca llores en su presencia, no te enfades, ni le demuestres que te molesta. Si estás dolido, que no se note.
Este fue el lema que llevó por nombre el Festival Mariano que se celebró este 5 de octubre se llevó a cabo en la comunidad de Neblinas de nuestra Parroquia,